El Pointer ha sido definido como el perro de caza por excelencia, en virtud de sus clásicas formas. Velocísimo e incansable cazador, orgullo de los apasionados de las grandes búsquedas por sus grandes cualidades, que sabe poner de manifiesto sobre terrenos llanos y limpios.
Dotado de un finísimo olfato, sabe percibir el más leve olor de cualquier animal, incluso en climas cálidos y secos. Galopador incansable, de ánimo impetuoso y buscador veloz.
Las características de su modo de trabajar son la muestra muy firme, erguida y muy expresiva, y la guía decidida y vehemente. Es un perro cariñoso, y cuando se propone algo no para hasta conseguirlo
Características
Tiene un tórax ancho, muslos y patas bien desarrollados y musculosos. Pies ovalados, con dedos arqueados. Cola de mediana longitud, gruesa en la base, se va afinando gradualmente hacia la punta, llevada a nivel del cuerpo. El pelaje es fino, corto, rígido, perfectamente liso y lustroso.
La altura a la cruz deseada, para el macho, es de 63 a 69 cm (25 a 28 pulgadas), para la hembra de 61 a 66 cm (24 a 26 pulgadas). En los machos el peso oscilará entre los 20 y 30 Kg.
Usualmente viven entre 13 a 14 años.
Adiestramiento
En un primer lugar antes de darle una orden a nuestro perro, es llamar su atención. Un estupendo ejercicio para la obediencia de nuestro can es cada vez que le demos una orden llamarle por su nombre. Cuan el perro es llamado por su nombre lo que estamos consiguiendo es su atención, una vez conseguido esto, le daremos las ordenes necesarias.
Las ordenes debe darse una sola vez, no repetirlas, aunque el perro realice el ejercicio regular, ya que en el caso contrario pensará que no es necesaria una obediencia inmediata y cada vez tardará más en responder a nuestras órdenes.
Nunca debemos castigar al perro, hasta que sepamos con exactitud que el perro ha comprendido perfectamente la orden y no quiera realizarla, con una actitud contraria, podríamos confundir al can. Hay que intentar enseñarle de la manera que él lo comprenda sin llegar a castigarle.
Los ejercicios deben ser repetidos con series limitadas cada día, si no llegaremos a aburrir al perro y su aprendizaje será cada vez mas deficiente.
Cuando una orden sea desobedecida, no hay que castigarle cuando llega a nosotros, ya que esto creara una reacción ante el perro que le producirá temor cada vez que sea llamado, "nadie va a un sitio si de antemano sabe que le van a castigar".
Importante no es ir detrás del perro cada vez que nos desobedece con la intención de atarle, ya que esto, lo relacionara con su perdida de libertad.